Cuando es de noche no es de día, cuando es de día no es de
noche.
Cuando hay paz no hay guerra; cuando hay guerra no hay paz.
¿Cómo pueden
estar en lucha el día con la noche, o la guerra con la paz?
¡Ni siquiera se
consiguen a la vez!
No se puede luchar contra lo que no está,
sólo dejarlo
pasar cuando le toca marcharse.
El guerrero que mira y vive, es quien navega
entre la guerra y la paz,
entre el día y la noche.
Aunque alrededor de él halla
guerra, en su mente hay paz,
como cuando es de noche, en su mente brilla el
sol.
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