Todos quieren llegar rápido a todos lados, la gente corre, el mundo corre, y vos por añadidura corres.
Y no te das cuenta que el último tramo del año, que debería ser usado para sentarse en paz a agradecer todo lo aprendido, lo compartido, lo soltado y lo vivido, que se pasa volando.
Deseo que hayas despedido un Noviembre intenso, con mucha gratitud.
Y que hayas abierto tu corazón para recibir el mes de los milagros, como se lo llama en ciertas culturas.
Que en Diciembre abraces mucho y más.
Regales más te amo y te quiero, de esos que salen de las entrañas.
Que hagas más fiacas en la cama sin culpa, que jamás te vayas a dormir enojado.
Que cierres los ojos cada vez que te abracen y guardes en la biblioteca de tu alma el aroma de cada ser amado, porque hoy están.
Que disfrutes cada cena, cada encuentro, que estés presente y presente’.
Que veas todo el camino recorrido y lo que falta, veremos cómo hacemos.
Pero este mes, aminorá la marcha y animate a vivirlo lejos del caos colectivo.
Y ahí sí, vas a ver que también se lo puede transitar en paz.
Te deseo mucha gratitud y consciencia, y que puedas ver la vida con todo el amor posible, aún en el dolor.
Y dejate maravillar, cuando la vida te responda de la misma manera.
Autor desconocido
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