Aceite de oliva, todo mal quita.
Acuéstate sin cenar y amanecerás sin
deuda.
Al buen pagador, no le duelan prendas.
Ándome por aquí como Pedro por su casa.
A boda, ni bautizado, no vayas sin ser
llamado.
A buen entendedor, pocas palabras
bastan.
A falta de pan, buenas son tortas
A gran seca, gran mojada.
A lo hecho, pecho.
A tal señor, tal honor.
A la vejez viruela.
A mal tiempo, buena cara.
A palabras locas, orejas sordas.
A otro perro con ese hueso.
A quien madruga, Dios le ayuda.
A rey muerto, rey puesto.
A la leche, nada le eches.
A canas honradas, no hay puertas
cerradas.
A falta de manos, buenos son pies.
A
grandes males, grandes remedios.
Barriga llena, no siente pena.
Bien está, lo que bien acaba.
Cada loco con su tema.
Cada Ollero alaba su puchero.
Casa cerrada, casa arruinada.
Comida sin vino, no vale un comino.
Con la vara que mides, te han de medir.
Con paciencia el cielo se gana.
Consejos vendo y para mí no tengo.
Cuando uno más tiene, tanto más retiene.
Cuatro ojos ven más que dos.
Cuando el río suena, agua lleva.
Dame pan y dime tonto.
Dinero llama dinero.
Donde las dan, las toman.
Del árbol caído, todos hacen leña.
De la Abundancia del corazón, habla la
boca.
En casa del herrero, cuchara de palo.
El mal cobrador, hace mal pagador.
Éramos pocos y parió la abuela.
El Casado casa quiere.
El avariento, ni pobre ni rico está
contento.
El bien suena y el mal vuela.
El consejo no es bien recibido, donde no
es pedido.
El hábito no hace al monje.
El hombre y el oso cuanto más feo más
hermoso.
El nombre sigue al hombre.
El ojo del amo engorda al caballo.
El pan, pan, y el vino, vino.
El perro del hortelano, que ni come las
berzas ni las deja comer al amo.
El pez grande se come al chico.
El que se fue a Sevilla perdió su silla.
El que no cojea, renquea.
El que no llora, no mama.
El que poco tiene, poco se precia.
El que quiera honra, que la gane.
El que rompe, paga.
El saber no ocupa lugar.
En boca cerrada no entran moscas.
En martes, ni te cases ni te embarques.
En tierra de ciegos, el tuerto es rey.
En todas partes cuecen habas.
Errando se aprende.
Estómago con hambre, no escucha a nadie.
En Abril, aguas mil.
El que comió, voló.
El diablo sabe por diablo pero más sabe
por viejo.
Favores harás y te arrepentirás.
Gallo que no canta, algo tiene en la
garganta.
Genio y figura hasta la sepultura.
Gato con guantes, no caza ratones.
Hierba mala nunca muere.
Hombre prevenido vale por dos
Hoy figura, mañana sepultura.
Haz bien y no mires a quién.
Habló el buey y dijo mu.
Hacer un hoyo para tapar otro.
Juan palomo: yo me lo guiso y yo me lo
como.
Juego de manos, juego de villanos.
Lo cortés no quita lo valiente.
La ocasión hace al ladrón.
La cabra siempre tira al monte.
La letra con sangre entra.
La mano, al pecho; y la pierna, en el
lecho.
La cama guarda la fama.
La dicha de la fea, la hermosa la desea.
La experiencia es madre de ciencia.
La mierda cuanto más la mueven, más
huele.
Las cosas bien pensadas, bien acertadas.
Lo que no se llevan los ladrones,
aparece por los rincones.
Limpia tu moco y no harás poco.
Lo que con unos se pierde con otros se
gana.
Lo que mucho vale, mucho cuesta.
Mal de muchos consuelo de tontos.
Mucho ruido y pocas nueces.
Más hace el que quiere que el que puede.
Más sabe el diablo por viejo que por
diablo.
Más vale malo conocido que bueno por
conocer.
Más vale maña que fuerza.
Muerto el perro se acabó la rabia.
Más vale solo que mal acompañado.
Más vale tarde que nunca.
Más vale prevenir que ser prevenidos.
Más vale ser cabeza de ratón que cola de
león.
Nunca es tarde si la dicha es buena.
No por mucho madrugar amanece más
temprano.
Nunca digas de este agua no beberé.
No es mal sastre el que conoce el paño.
No es oro todo lo que reluce.
No hay miel sin hiel.
No es tan bravo el león como le pintan.
No hay peor sordo que el que no quiere
oír.
Nunca falta un roto para un descosido.
Oír, ver y callar, recias cosas son de
obrar.
Ojo por ojo, diente por diente.
Ojos que no ven, corazón que no siente.
Pan para hoy y hambre para mañana.
Perro ladrador, poco mordedor.
Piensa el ladrón que todos son de su
condición.
Piensa mal y acertarás.
Por la muestra se conoce el paño.
Pan con pan, comida de tontos.
Querer es poder.
Quien bien siembra, bien recoge.
Quien calla, otorga.
Quien hurta a un ladrón gana cien años
de perdón.
Quien mal anda, mal acaba.
Quien mucho abarca, poco aprieta.
Quien mucho habla, mucho yerra.
Quien hace la ley, hace la trampa.
Quien ríe el último ríe mejor.
Sarna con gusto no pica.
Si te vi, no me acuerdo.
Si quieres buena fama, no te dé el sol
en la cama.
Sobre gustos no hay nada escrito.
Tanto vales cuanto tienes.
Tirar la piedra y esconder la mano.
Tanto va el cántaro a la fuente, que
allí deja el asa o la frente.
Unos nacen con estrella, y otros nacen
estrellados.
Yo me he visto en los cuernos del toro.
Zapatero a tus zapatos.
Músico pagado suena ronco.
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