Vivir
deliberadamente en los límites de las cosas, en resistencia activa a un mundo
que pone todo su valor en la velocidad y la productividad... Es un recordatorio
de que más que nunca necesitamos personas dispuestas a hacer una pausa y
escuchar, a abrir sus corazones a lo que es incómodo, y para mantener un
espacio y atención hasta que surja lo nuevo.
Tal vez...
Si seguimos practicando... Escucharemos susurros de un nuevo comienzo.
Christine Valters Paintner
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